mis plegados

miércoles, julio 30, 2008

Este es nuestro grito, esta es nuestra plegaria: ¡Paz en el Mundo!




A veces me pongo a pensar en la cantidad de tiempo y energía que dedico a esta actividad y, aunque me repito una y mil veces que más que una afición ésta es una forma de arte, no puedo dejar de considerar cuánto de egoísta o de satisfacción personal me mueve a hacerla, cuánto de disciplina, trabajo y dedicación personales, en desmedro de una preocupación o una perspectiva más social u orientada hacia los demás. Tal vez como una manera de compensar esto realizamos talleres y tratamos de mostrar o enseñar los primeros pasos, o aquellas figuras más sencillas, para entregar (sobre todo a los niños) una alternativa más de entretención, educación y disciplina.




Hace un año atrás, escuché de mi amiga Meri Affrachino la historia de la pequeña Sadako Sasaki. A la edad de dos años ella era una habitante más de la ciudad japonesa de Hiroshima, que el 6 de Agosto de ese año (1945) sufrió la destrucción apocalíptica de la primera de las bombas atómicas que Estados Unidos dejó caer en ese país; ese día más de 120 mil personas, casi todas civiles, murieron instantáneamente y se estima que alrededor de 300 mil resultaron gravemente heridas o afectadas gravemente por la radiación; 3 días después, 140 mil personas más murieron por la caída de la segunda bomba atómica en la ciudad de Nagasaki, en pleno centro de la ciudad, muy lejos de su blanco que era la cercana fábrica Mitsubishi. Sadako vivió con normalidad hasta los 11 años, edad en la que se le diagnosticó Leucemia, debido a su exposición a la radiación; esta terrible enfermedad cancerosa la consumió rápidamente y la dejó postrada en una cama de hospital. Ahí escuchó la historia tradicional de las mil grullas de papel.

Cuenta la leyenda que un hombre enfermo de muerte hizo mil grullas de papel para honrar al ave sagrada, famosa por su longevidad y pureza, en agradecimiento ésta lo sanó y le dió una larga vida, la tradición es que los enfermos hagan esta cantidad para pedir por su salud. Como una forma de mantener su esperanza de sanar y volver a correr, Sadako se abocó al doblado de esta figura con cuanto papel estuviera a su alcance en el hospital y con el tiempo ella deseó rogar por las demás víctimas de la guerra y por la paz. Desgraciadamente, murió el 25 de Octubre de 1955 luego de 14 meses de hospitalización, logró hacer 644 grullas. Se dice que sus amigas de escuela doblaron las 356 que faltaban y las depositaron todas en su tumba junto a ella.

Desde entonces, cada 6 de Agosto, miles de personas se reúnen para plegar y colgar grullas en recuerdo de la pequeña Sadako y para clamar por la Paz y el fin de la guerra.

Para los que nos dedicamos al origami, doblar una grulla tradicional resulta algo muy sencillo y hasta trivial; sin embargo, no atender este ejemplo y este llamado es sencillamente un pecado fuera de toda lógica y comportamiento. En nuestro continente, en la ciudad de Rosario (Argentina), gracias a la inagotable Meri y su grupo, desde hace 9 años hacen esto cada 6 de Agosto, reuniendo el año pasado más de 20.000 grullas de múltiples colores. Este año, en Chile, en la ciudad de Valdivia, el fin de semana pasado ya se reunieron para plegar y colgar grullas y este Sábado 2 de Agosto lo haremos en la capital Santiago, acto al que invito a todos a participar; será un momento de entretención y color, en la plaza Mori del Barrio Bellavista, exactamente al mediodía, habrán talleres de origami y nos uniremos al grito que se encuentra escrito sobre memorial de Sadako:

“Este es nuestro grito, esta es nuestra plegaria: ¡Paz en el Mundo!”

Espero con ansias visitar a mi amiga en Rosario y colaborar con algo en el encuentro de este año.

Un saludo a todos.



Vínculos:
Convocatoria Mil Grullas por la Paz Santiago, Chile, 2 de Agosto (Facebook).
Proyecto Mil Grullas Por la Paz Rosario Argentina, 6 de Agosto
Proyecto Sadako.com
Cómo hacer una grulla